viernes, 13 de junio de 2008

Qué triste llamar la atención por eso.

Hoy he sorprendido y llamado la atención de dos señoritas. Y no ha sido, contra todo pronóstico, por ir por la calle haciendo el baile del pollo. Eran una estanquera y una cajera de supermercado. A la vuelta de un examen he adquirido en los establecimientos que atienden tres sellos y una botella de Licor 43 y un paquete de medio quilo de espagueti, respectivamente.

Y se han sorprendido porque... he dicho "gracias" al finalizar la transacción comercial.

¡Cómo está la sociedad! ¡Te miran raro por ser educado!

2 comentarios:

Oscar dijo...

Vas a dos sitios, compras tres cosas, y compras a respectivas personas!

Dos de esas cosas deberían ser la misma, o una de las personas tiene doble personalidad!

it is awesome.

Gonzalo Varo Ortega dijo...

It is a mistery.